Brota del Manantial de Fuencaliente en Solares (Cantabria) con un caudal de 2.000 millones de litros al año. Aunque fue declarada de utilidad pública en 1828 sus efectos beneficiosos para el organismo, se conocen desde hace más de 700 años.
Debido a su equilibrada mineralización el Agua de Solares es un agente digestivo, diurético y sedante, consecutivo regularizador de las funciones nerviosas.
Desde 1828, en que Solares es declarada Agua Mineral de Utilidad Pública, el histórico manatial se convierte en baluarte de progreso y modernidad, ofreciendo sus cualidades minero-medicinales tan benificiosas tanto para el aparato digestivo como para las afecciones de riñón. También como sedante y tónico del sistema nervioso.