La afluencia de público fue la nota destacada durante los cuatro días que duró la muestra, llegando el sábado y domingo al límite del aforo permitido. En palabras de Ángeles Parra, directora de BioCultura, “es evidente que la ciudadanía está despertando. La apuesta por una vida saludable ya es imparable, y BioCultura BCN es ya una gran referencia del mercado orgánico en todo el arco mediterráneo”.
El buen tiempo y la presencia de las firmas que están marcando las tendencias de consumo ecológico contribuyeron a superar los registros de ediciones anteriores, tanto de visitantes como de expositores. Ello ha llevado a que los responsables de las empresas mostraran su satisfacción por el gran volumen de ventas, contactos y negocios conseguido.
Pero BioCultura es mucho más que una feria convencional. Los visitantes no sólo acudieron al Palau a comprar y a conocer las novedades reunidas en un mismo recinto, sino también a disfrutar de las cerca de 400 actividades que se organizaron paralelamente a la actividad comercial, entre charlas, talleres, debates, jornadas profesionales, ponencias cienítificas, conferencias, etc. La mayoría de las 11 salas de actividades se llenaron de público en los diferentes horarios. Este año, además, se habilitó una zona exterior donde reunir todos los servicios de restauración, las actuaciones musicales, zonas de esparcimiento, chillout, etc., lo que contribuyó a crear un ambiente lúdico-festivo y a descongestionar los pasillos de los pabellones.
Junto a las novedades en alimentación, el interés de los visitantes se ha dirigido a la cosmética econatural y al textil orgánico, dos sectores por los que la Asociación Vida Sana ha apostado muy fuerte creando las plataformas Ecoestética y Planeta Moda para impulsar y dar a conocer su oferta ecológica y los beneficios que estos productos tienen sobre el organismo y el medio ambiente.
Otro apartado que es terreno abonado para poner en marcha nuevos proyectos de desarrollo y sostenibilidad es el de la bioconstrucción. En la feria había varios ejemplos, desde construcciones de casas unifamiliares con estructura de madera, hasta aplicaciones de construcción con balas de paja, pasando por nuevas alternivas como los Domo.
Y como es habitual, BioCultura también piensa en los consumidores del mañana, los niños, a los que se les han organizado MamaTerra, el Festival Ecológico de la Infancia donde disfrutaron de infinidad de actividades, talleres, sesiones de maquillaje, de cocina, actuaciones, conciertos, juegos...
La próxima cita de BioCultura tendrá lugar del 2 al 4 de octubre en el Bilbao Exhibition Centre (BEC) de Bilbao.